Samanta se encuentra todas las noches con el perdido semblante de su abuelo. Un hombre solitario que mira las estrellas todo el tiempo esperando algo. Algo que lo haga llenarse de vida nuevamente y sentirse útil una vez más. Con deseos incontrolables de ser el joven salvaje y rebelde de su pasado.
Después de todo es un Hombre de Hierro. Tony, el Abuelo Stark, su Abuelo Stark.